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Steve Sisolak, un aliado de la comunidad migrante michoacana, que radica en Las Vegas, Nevada.
Por Macario Ramos Chávez.
Las Vegas, Nevada, USA.- Es un triunfo demócrata, que se fue construyendo desde las cocinas, en restaurantes, hoteles y casinos, con el apoyo de carpinteros, la culinaria y una comunidad latina, en el hartazgo de las políticas racistas y xenófobas, que impulsa el Presidente Donald Trump.
La ola azul, sigue creciendo, soplan vientos de cambio. La comunidad migrante michoacana, hace suya la victoria de Steve Sisolak, que tocó puertas, acudió con los electores, estableció compromisos para impulsar la Agenda y el resultado está a la vista.
Entre los encuentros, podemos destacar la presencia del ahora Gobernador electo, al Restaurante Elys, propiedad de Roan Torres, originario de la Comunidad Indígena Purhepecha de Cheranástico, exitoso empresario, emprendedor y orgulloso de sus orígenes.
Sisolak, acompañado por el inseparable politologo Francisco Morales, al tiempo que expuso los proyectos a realizar, con el apoyo de los michoacanos que radican en el Estado Plata, degustó el sabroso pozole, con todo y salsa de aceite, conoció el menudo, preparado con la receta tradicional y un exquisito guacamole, con aguacates de Uruapan.
Y así como ésta reunión, hubo muchas reuniones con la comunidad, recogiendo sus demandas y elaborando un plan, que será sin duda, un éxito, ya que es la expresión de quienes están dispuestos a seguir viviendo el sueño americano, claro que sí se puede.
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