Ciudad de México.- Luego de la situación tan delicada que ocurriera en algunas comunidades del estado de Michoacán, entre ellas del Municipio de Chilchota y ante el actuar de las autoridades del gobierno del estado, en cuanto al uso de la fuerza física e incluso la aplicación de gases lacrimógenos para sofocar el reclamo que hacían los indígenas, el Senador de ese estado, Casimiro Méndez Ortiz, desde la tribuna del parlamento de la república expresó su posicionamiento como integrante de la cámara alta, declarando que “tiene que ver con rechazar la represión que se estaba realizando en la comunidad indígena de Ichan, Santo Tomas y no es la primera vez que el gobierno del estado, en lugar de agotar todos los recursos, las instancias de dialogo, pretenda resolver, mediante la fuerza policiaca, este tipo de problemas”.
“Nosotros siempre hemos manifestado dentro de nuestra línea política, respeto a las comunidades indígenas, a su autonomía, a sus decisiones y sobre todo hay una línea del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, jamás volver a utilizar a la fuerza publica para resolver un conflicto y es inconcebible entonces que haya la postura del gobierno estatal”, abundó.
En este caso, dijo, “el gobernador –Silvano Aureoles- sí está aplicando la fuerza pública hacia las comunidades indígenas y no es la primera vez, en el caso de Caltzontzin, Arantepacua, Capacuaro, por lo tanto, no queremos que eso se convierta en la forma de gobernar por parte del gobierno de Michoacán.
Agregó que la nueva jefa de gobierno de Cdmx acababa de prescindir de un cuerpo de granaderos, “esta es la fuerza que tenemos como izquierda, ya que para resolver los conflictos comunales que ocurren en Michoacán optamos por el dialogo, y no en la violencia”.
Sostuvo que al parecer es un conflicto derivado de la autoridad comunal anterior con la nueva y al final son diferencias entre comunidades.
“Y bueno, el día de ayer hablé con algunas autoridades de Chilchota que es el municipio al que pertenecen, aquí en la oficina de la Ciudad de México, nos comentaban que es un conflicto interno y que ello se hace para coadyuvar a que se resuelva”, indicó.
Y más adelante, el senador refirió que el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, siempre lo ha dicho: “el dialogo está después del dialogo, el dialogo valioso y decir que precisamente estos eventos políticos internos dentro de nuestras comunidades tampoco sean un elemento para desestabilizar a nuestros propios pueblos”.
“Lo decimos de la siguiente manera, que a la fuerza pública, o sea, que cuando se utiliza como tal, para reprimir a los pueblos mediante ese método, si hubiera un accidente que se le cae una pistola a un policía, hay un caído por el uso de la fuerza, hay la posibilidad de que se enrarezca el clima político y es lo que no queremos más”, abundó.
Y el asambleísta de la Cámara Alta declaró que:
“A nosotros nos preocupa porque Chilchota es de un partido a fin al nuestro y bueno nuestra fuerza siempre será el dialogo”.
O sea, “tenemos muchos compañeros nuestros que trabajan en esas comunidades indígenas y son quienes nos estaban relatando lo que estaba pasando, lo que estaba sucediendo en esos momentos tan delicados, de hecho hubo gas lacrimógeno cayendo hacía las escuelas y me parece inconcebible, quiero decirles que antes de hacer nuestro pronunciamiento, nosotros aguantamos hasta el final”.
En el momento en que nosotros supimos de la represión, “hicimos fácil más de 20 llamadas desde nuestra oficina al gobierno del estado y no nos tomaron la llamada, y es la manera que actúa el gobierno del estado de Michoacán, siendo un gobierno de puertas cerradas y de oídos sordos; y yo recurrí a mi coordinador parlamentario, Ricardo Monreal, el también intentó llamarle al gobernador del estado o al secretario de gobierno, no tuvo respuesta y también hablamos y le solicité al compañero Martí Batres, Presidente de la Cámara de Senadores, su intervención y se preocupó mucho con el asunto de la represión, pero no nos atendieron la llamada”.
En resumen, sostuvo que “en esta ocasión hubo varios intentos de contacto con el gobierno del estado y no funcionó y esto también nos preocupa, ya que si desde un Senado no nos escuchan, no se prestan al dialogo, pues se comprueba lo que siempre hemos dicho: que al ciudadano difícilmente se le puede atender, “nada”, literalmente “nada”.
Comments