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CDMX.- Alemania, 9 de enero de 2013.- «Simplemente se tomaba lo que él quería», aseguró Pola Kinski, hija del actor Klaus Kinski, al confesar años de abusos sexuales de parte de su padre, en una entrevista exclusiva con la revista «Stern».
Klaus es una figura de la cinematografía alemana. Aún después de su muerte ocurrida hace más de dos décadas, es famoso en el país europeo por sus papeles de «malo», ya que interpretó a criminales y tiranos. «Para su hija fue así también en la vida real», denunció la publicación germana.
Pola, quien tiene 60 años, es la hija mayor del actor que murió en 1991, y por primera vez se atrevió a denunciar abusos sexuales que dijo que empezaron cuando tenía cinco años y terminaron a la edad de 19.
«Lograba imponerse en todo. También en eso. No le importaba que en muchas ocasiones me rebelara y dijera: ‘No quiero'», relató la hija, de acuerdo con declaraciones que fueron adelantadas hoy en la versión digital de la revista que saldrá mañana a la venta.
Pola tenía tres años cuando sus padres se separaron. Se mudó entonces a vivir con su madre, la cantante Gislinde Kühlbeck; sin embargo, cuando su mamá empezó una nueva relación, ella se sintió abandonada.
Según su versión actual, su padre natural reconoció su necesidad de afecto en aquel entonces y la usó sin vergüenza para satisfacer sus deseos personales.
Aseguró que nunca pudo ver a su padre como un actor, ya que vivía con el miedo permanente de sus brotes de ira: «Cuando miraba sus películas lo veía tal y como en casa».
Pola Kinski tuvo muy joven un gran éxito como actriz de teatro, pero decidió retirarse pronto de la profesión. En su opinión, Klaus Kinski «simplemente abusó de todos, nunca respetó realmente a las otras personas».
Ahora decidió escribir el relato entero de su atormentada historia y publicar un libro titulado «Kindermund», boca de niño, con el que pretende acabar con el mito de su padre.
Confesó que ya no podía aguantar más que todo el mundo hablara de su padre como «un Dios» o «un genio» y denunció que la beatificación inmerecida del actor es todavía más fuerte ahora, después de su muerte.
Klaus Kinski nació en Danziga en 1926 y fue un actor vinculado particularmente con el cineasta alemán Werner Herzog, para quien interpretó películas ya icónicas, de culto, entre varias, «Aguirre, la ira de Dios» «Fitzcarraldo y Nosferatu».
Juan Heladio Ríos Ortega.
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