En Michoacán es necesario fortalecer la implementación de la justicia especializada en materia infantil y mejorar las condiciones de vida de los menores y garantizar sus derechos desde la legislación local, por ello, los diputados que integran el Grupo Parlamentario del PRD en la LXXIV Legislatura Local hicieron un llamado a que se dictamine el paquete de reformas a los Códigos Penal y Familiar del Estado, así como a la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, que se presentó a Pleno el pasado mes de diciembre.

Los diputados Araceli Saucedo Reyes, Norberto Antonio Martínez Soto, Antonio Soto Sánchez y Octavio Ocampo Córdova coincidieron en la necesidad que nuestro estado avance en la prohibición y eliminación de toda forma de castigo corporal, como medida de protección a los menores y adolescentes, al establecerlo de manera clara en la legislación vigente, además de caminar a una nueva cultura de respeto y en la conformación de una sociedad libre de violencia.

Recordaron que nuestro país ocupa el primer lugar en violencia física, abuso sexual y homicidios de menores de 14 años, ante ello, la reforma que en diciembre pasado presentó el maestro Adrián López Solís, tiene como finalidad que Michoacán avance hacia la prohibición y eliminación de toda forma de castigo corporal, reconociéndola como violencia contra niñas, niños y adolescentes, tema que es una prioridad para el Grupo Parlamentario del PRD.

Estas reformas fortalecen las acciones al garantizar desde la ley que el estado cumpla con sus obligaciones para prevenir y garantizar el goce y ejercicio del derecho a la integridad personal y a una vida digna libre de violencia para todas las personas menores de 18 años.

En el país ya son 19 entidades federativas las que establecen en su legislación la prohibición de infligir daño a las niñas, niños o adolescentes, o castigo corporal apelando a la facultad de corregir, orientar, educar o formarlos.

Ante ello, Michoacán requiere avanzar y contar con la armonización legal, lo que fortalece la protección y los derechos tanto de los menores como de adolescentes, tarea en la que todos deben aportar.

De acuerdo con la UNICEF, el 60 por ciento de los menores mexicanos de 1 a 4 años han experimentado algún método de violencia; 5.5 por ciento de las niñas y niños en nuestro país ha sufrido violencia sexual; 16.6 por ciento sufren algún tipo de violencia emocional; y 8 de cada 10 agresiones contra menores y adolescentes se da en la vía pública o en sus escuelas.