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• Un entorno libre de violencia es la gran deuda pendiente
En México es urgente que la Federación brinde certidumbre en la atención y protección a las mujeres, durante esta contingencia y después de la misma, más cuando se contabiliza que en los primeros 18 meses del actual gobierno federal, más de 5 mil 800 mujeres fueron asesinadas, subrayó la diputada Araceli Saucedo Reyes.
La también secretaria del Comité Ejecutivo Estatal del PRD, reprobó el desinterés de la Federación para atender la inseguridad en el país, y no brindar certeza sobre los recursos para protección a mujeres.
De acuerdo con las cifras actualizadas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de diciembre de 2018 a mayo de 2020, fueron asesinadas 53 mil 628 personas en México, de los que 5 mil 811 de las víctimas son mujeres, lo que representa casi 11 casos al día, agravándose también los homicidios de menores, al reportarse mil 807 en ese periodo.
Los homicidios, feminicidios y violencia han incrementado de manera alarmante en este gobierno, por lo que Araceli Saucedo urgió a implementar acciones inmediatas para generar un entorno libre de violencia.
“El Gobierno Federal desde su propio titular, ha mostrado un claro desdén al incremento de la violencia contra la mujer en estos tiempos y es preocupante que no exista interés de atender este problema”.
Urgió a que se precisen acciones en favor de las mujeres desde la Federación y que se atienda con seriedad la crisis sanitaria, así como sus efectos en los diversos sectores sociales, como es el hecho de que la violencia contra las mujeres y asesinatos han incrementado.
“Los recursos para la protección de mujeres víctimas de violencia no debe ser incierto, menos utilizar la crisis sanitaria para desproteger a este sector, que por años y en esta emergencia sanitaria sigue sufriendo violencia”.
La legisladora integrante del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática apuntó que el golpe a quienes representan más de la mitad de la población en México, se ha visto desde la confección de los presupuestos federales, en donde las mujeres han sido relegadas a segundo término.
“Pero la situación ha sido más grave en la crisis sanitaria, en donde el confinamiento para evitar casos de contagio, puso a miles de mujeres en una condición de riesgo mayor para sufrir violencia, muchas de ellas han decidido abandonar sus hogares debido a las agresiones de sus esposos, parejas o familiares, lo que ha hecho que los refugios para víctimas estén saturados”.
Finalmente, reiteró que la política del Gobierno Federal para la atención a las mujeres es deficiente, ya que se hace caso omiso a la realidad de violencia y agresiones de las que son víctimas, así como también al reducir los recursos para este sector.
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