Durante el gobierno estatal de Leonel Godoy Rangel, basados en documentos de un dudoso carácter legal conocidos como “minutas”, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) recibió un trato preferencial y hay constancia de que se le entregaron decenas de millones de pesos, hecho que deja ver las acciones implementadas por el gobernador michoacano.
A detalle, en junio de 2008, tras una serie de reuniones entre los entonces representantes del gobierno del estado y la citada coordinadora, en aquél entonces encabezada por Artemio Ortiz mejor alias como “El Muñeco”, se firmaron una serie de acuerdos que complicaron aún más, la embrollada viabilidad económica de la entidad.
Precisamente, el 6 de junio de 2008, el gobierno de Godoy Rangel condujo la negociación Fidel Calderón Torreblanca, en su carácter de secretario de gobierno del Estado de Michoacán, y Humberto Suárez López, secretario de Finanzas y Administración; acompañando al líder de la Coordinadora, “El Muñeco”, como parte de su comité; y en su momento, también firmaron el documento: Jorge Cázares Torres, Carlos Tinoco Carlón y Benjamín Hernández Gutiérrez, entre otros.
Cabe recalcar que entre los millonarios compromisos pactados entre gobierno estatal-CENTE, se registra la entrega de 10 millones de pesos a la Coordinadora para la organización del denominado “Congreso Estatal Popular de Educación y Cultura en el Estado de Michoacán”, mismo que tenía la supuesta finalidad de obtener “un diagnóstico integral del estado que definan las líneas generales del plan integral del desarrollo, y el Plan educativo para Michoacán”.
Pero eso no es todo, se concedieron 6 millones de pesos, “para programas de construcción, mantenimiento y equipamiento de oficinas de supervisión escolar, así como para material de oficina”.
Y otro más: “Para facilitar la labor de los trabajadores del Personal de Apoyo y Asistencia, el Gobierno del Estado dispondrá de un monto de 10 millones de pesos para la dotación de paquetes de herramientas e implementos necesarios y de calidad”.
En este tenor, siendo más analíticos, en el punto número 30 del documento (cuya copia consta en esta redacción) se lee:
“En reconocimiento a los alcances del programa de apoyo a la jubilación como parte del proceso de reordenamiento y saneamiento de la SEE, el Gobierno del Estado sostendrá este programa. Por lo que para el año 2008-2009, destinará 20 millones de pesos”.
En tal sentido, la Sección XVIII expresaba, por escrito, su rechazo a las “Escuelas de Horario Extendido”, los programas “Escuela Segura” y “Escuela de Calidad”, y asimismo a los “Consejos de Participación Social”.
Por cierto, en la última clausula, la número 49, la administración encabezada por Godoy Rangel, renunció a su obligación de cumplir y hacer cumplir la ley; en tanto, la rectoría del sistema educativo y la defensa del derecho de las mayorías.
Por último, se cita: “El Gobierno del Estado (consigna el documento), no ejercerá ningún tipo de represión en contra de los trabajadores de la educación como consecuencia de su participación en las actividades de carácter sindical”.
Lo anterior queda a tela de juicio, ya que sin duda la transparencia del gobierno de Leonel Godoy registra, en este caso, una anomalía del ejercicio público que le facultaba al ejecutivo estatal, bajo conducto de Calderón Torreblanca, estableciendo acuerdos “a modo”, con la referida CENTE.
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