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Hoy más que nunca es necesario que toda autoridad asuma con plena responsabilidad el compromiso de sacar adelante a nuestros pueblos originarios, que forman parte de nuestra raíz y de nuestro presente, por lo que ignorarlos y marginarlos es atentar contra el corazón de México, afirmó la coordinadora del Grupo Parlamentario del PRD, Araceli Saucedo Reyes, durante una gira de trabajo por diversas comunidades.
Luego de diversas reuniones de trabajo, la legisladora coincidió que es necesario que en el país se priorice la atención y desarrollo de este sector de la población y señaló que el Estado Mexicano tiene una deuda histórica con las comunidades.
Si bien, la problemática que enfrentan las comunidades indígenas se ha venido visibilizando, aún falta mucho trabajo por realizarse en beneficio de todos ellos, para fortalecer su crecimiento y garantizar su desarrollo.
Es lamentable, dijo, que en México, diversas comunidades indígenas registren niveles de desnutrición superiores a los de África, y que de los 2.7 millones de niños indígenas mexicanos el 22.8 % no reciben instrucción escolar.
Aunado a ello, agregó que los hermanos indígenas son los más pobres entre los pobres, ya que nueve de cada diez, no cuentan con el equipamiento básico para acceder a la información; ocho de cada diez habitan en viviendas con carencias materiales graves y con alto grado de hacinamiento; tres de cada de cada diez no tienen acceso al agua potable ni a fuentes seguras de agua; y nueve de cada diez no cuentan con instalaciones de saneamiento, afectando así sus condiciones de vida y salud.
La población indígena en México se estima en 15.7 millones de personas, por lo que apostarle por su desarrollo y fortalecimiento es una responsabilidad que autoridades en México, no se pueden hacer los omisos antes las necesidades que ellos tienen.
La diputada por el Distrito de Pátzcuaro recordó que la población indígena en México se estima en 15.7 millones de personas, de las que 11.1 millones viven en un hogar indígena, de las que menos de la mitad hablan lengua indígena, mientras que los 9.1 millones restantes ya no lo hacen.
Por lo anterior, durante su gira de trabajo la legisladora se comprometió a llevar sus planteamientos y atender de manera puntual las gestiones que día a día le formulan en beneficio de las comunidades indígenas.
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