Una colección de postales sobre los espacios y tiempos de la banalidad y la paz, mínimos e imposibles de sostener entre la Ocupación Francesa y la Guerra de Argelia. Lo que supone una historia de recuperación del viejo amor y del reencuentro esperado se torna en una dispersión de futilezas entre personajes despechados, envidiosos, pobres y aún amordazados. MURIEL (1963) de Alain Resnais es como todos los films de la nueva ola a los que el color les da otra dimensión, el montaje entrecortado y la velocidad de los saltos, sin embargo construyen perfectamente la idea de la imposibilidad de la vida íntegra; una extraña desarticulación de la historia personal, grupal y política también y lo inútil de la añoranza.
La idea del pueblo alejado de la gran ciudad pero sin embargo invadido por la vida moderna, el consumo y la arquitectura funcional. Dos historias militares, la del viejo amante señorial y sin embargo un mediocre y la del joven edípico soldado recién liberado del servicio militar al que lo persigue una historia oscura: dos Francias o tres porque Helena, vendedora de antigüedades, indiferente y luego incapaz como todos, víctima de las dos generaciones y frígida gris e indecisa…siempre indefinida. Resnais a fondo como la mayoría de las veces, entre la acidéz de Chabrol y la investigación Godardiana…delicia del Art Cinema…Déjà…pa plus…
Comments