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Cuando todo estaba listo para entrarle duro a la campaña electoral, el Instituto Nacional Electoral que le impide al profe Raúl Morón Orozco su registro como Candidato del partido Morena al Gobierno del Estado de Michoacán.
Fue una noticia que cimbró a medio mundo y más a los seguidores y defensores de la Cuarta Transformación aquí en este bellísimo estado, tierra de mis ancestros.
Iba caminando por los portales del centro de mi añorada Morelia este domingo, y que oigo que me grita un amigo añejo (morenista aferrado), del mero Zinapécuaro, el buen Alberto Ireta alias “El Bembo”:
– ¡Vaca!, ¡Vaca!, ¡Vacaaa!
Me detuve. Y que le pregunto: ¿Qué pasó Beto?
– ¿No te has enterado lo del INE?, ¿A qué vienen tantas chingaderas? Y el tal Cordoba ese, ¿quién chingados se creé?, ¡que no la chinge!
Empezamos hablar del tema, quise tranquilizarlo porque lo veía que andaba bien enchilado, y le dije que las instituciones electorales eran autoridad y se deberían respetar. Que me ve con ojos de perro bravo y me responde muy disgustado: “Vaca, ¿no ves que esto está de la chingada?” Escribe algo.
Yo ya deseaba marcharme a mis asuntos reporteriles, luego vería, pero “El Bembo” insistía con el tema de Raúl Morón.
Caminamos rumbo a los arcos, pasamos el Congreso y de un de repente que se detiene y que me mira como loco diciendo: “El INE está nomás para chingar, pero en acá en Morena nuestros líderes ya andan en chinguiza para resolver estas chingaderas”.
Y no dejaba de hablar:
Además, decía, Raúl Morón es un político muy chicho, una chucha cuerera, más hábil que El Cristo Balín, ¡es un chingonsisimo!, y en lo administrativo como presidente de este municipio ha sido una chingonada. Por eso, como gobernador será el más chingón que toda la bola de carbones que nada más han robado.
Estaba retrasado pero mi amigo morenista no me dejaba, y la verdad ya me tenía hasta la chingada, pero por cortesía lo seguí oyendo para que se desahogara. Le pregunté: Oye, y Leonel Godoy, ¿no puede ser el candidato? Sería un remedio chingón. Y como todo sectario del Oriente michoacano que me explica que Godoy iba pa´ diputao´…, y que a pesar de ser un chinguetas con harta experiencia, él preferiría que candidatearan a Torres Piña, un diputado federal harto vivo, ya que era un chingón y medio, y defensor de la cuarta t, pero que habían un chingo de intereses.
¿Y qué dice Raúl Morón? ¿Ya se dio por vencido?, le cuestioné.
– Pus comentan que nada más anda buscado los recursos legales para que Tribunal aclare su caso, y te digo que se despreocupe el INE, Morón no los chingará, ya que sabrás Vaca que mi gallo no tiene espíritu chingativo.
La plática seguía, pero gracias a la llegada del Tilico Ramos, quien se aproximó a cobrarme la lana que le debía, que pude despedirme de “El Bembo”, quien cruzó la Madero con rumbo desconocido, y como loco que me grita:
– Carlos Tadeo Vaca, pero eso si te digooooo: “¡chingo a mi madre si no ganamos con Morena!”
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