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Para el siglo XVIII Uruapan ya contaba con su plaza principal y algunos portales y plazuelas… en tanto cada barrio tenía sus propias calles, aunque sin una nomenclatura bien determinada.
En octubre de 1892, el gobierno estatal aprobó el re ordenamiento de las calles, numeración de casas y regularización de fachadas de todas las poblaciones de Michoacán, esto fue a través de cuarteles y éstos a su vez en manzanas.
Lo anterior se hizo con el fin de contar con un mejor servicio para la entrega de correspondencia, práctica de diligencias de orden civil, otorgamiento de escrituras y formación de padrones.
En el documento se indicó que todas las calles llevaran un sólo nombre, que podía ser de héroes nacionales, hombres ilustres, personas notables de la localidad o también nombres triviales.
Basados en el plano de 1897, Uruapan del Progreso estaba dividido en cuatro cuarteles, donde se localizaban sus barrios tradicionales.
Las calles del plano referido que siguen preservando su nombre son: Morelos, Nicolás Bravo, José María Arteaga, Carlos Salazar, Cupatitzio, Miguel Treviño, Francisco García Ortiz, Vasco de Quiroga, Antonio García Pueblita, 5 de Mayo, Libertad, Justo Mendoza, Gran Parada y Caracol.
Cabe decir que la mayoría de las calles del plano de 1897 han sufrido cambios en sus nombres desde la época posrevolucionaria, en este sentido, la vegetación que ha distinguido al paraíso michoacano ya desde la fundación hispana emprendida en 1533 por Fray Juan de San Miguel, ha dado pauta para que muchas calles llevaran el nombre de árboles, arbustos y plantas, por ejemplo, recordamos a la calle De las Flores, que hoy lleva el nombre de Juan Aldama; la De las Amapolas, hoy Dr. Miguel Silva; la De la Palma, se convirtió en Hilanderos; la calle De Belén, llamada Mariano Jiménez; De las Lechugas, en la actualidad Abasolo; calle De la Hortensia, que en nuestros días se llama Prof. Juan Ayala; la calle De la Aurora, hoy Aquiles Serdán; calle De la Pradera, actualmente Colón; calle De las Camelias, hoy Constitución; calle Del Jazmín, en actualidad de Amado Nervo; la calle De los Juaquiniquiles, hoy se llama Cuauhtémoc; y la Calle Del Mirasol, que lleva el nombre de Anillo de Circunvalación.
Del mismo modo, las calles se identificaban con los barrios fundados en el siglo XVI por Tata Juanito: la calle De la Trinidad, actualmente es Reforma; calle De la Magdalena, hoy Avenida Juárez; la calle De San Juan Evangelista, en nuestros días lleva por nombre, Manuel Ocaranza; la calle De San Miguel, hoy denominada Prof. Juan Delgado; y la calle de San Francisco Uruapan, ahora Alvaro Obregón.
A la par, el nombre correspondía, por ejemplo, a lugares, sitios, zonas o personajes locales, que eran familiares para los pobladores del antiguo vergel, aquí se encuentran: la calle De la Unión, llamada 5 de Febrero; calle De los Purépechas, en la actualidad Manuel Pérez Coronado y parte de Francisco Villa, antes calle de Circunvalación; la calle De Villagómez, hoy Acapulco; la calle Del Salto, transformada en 20 de Noviembre; calle Del Venado, actualmente Artículo 123; la calle De San Pedro, Lleva por nombre Pradera, calle De Pedro García, denominada Justo Sierra; la calle De la Paz, actualmente Francisco I. Madero; la Calle De Camela, en nuestros días titulada Abigail Patiño; calle Del Olvido, se llama Carrillo Puerto; la calle Del Desierto, hoy Revolución; la calle De Calzada de la Quinta, en el presente lleva por nombre al misionero Fray Juan de Miguel; la Calle Real, denominada Independencia; calle De la Industria, en la actualidad Pino Suárez; calle Del Torito, llamada Lerdo de Tejada; calle De Fernando Chávez, en la actualidad Justo Sierra; Calle Del Mirador, ahora Venustiano Carranza; la calle Del Espinazo, lleva por nombre Nicolás Romero; la Del Beaterio, Hoy Corregidora; la calle De Canoa Alta, en esta época, 16 de Septiembre; calle De García Pérez, hoy lleva el título de Isaac Arriaga; y la calle Del Encuentro, que en nuestros días es Manuel Doblado.
Para concluir, hoy existen no menos de 370 colonias con sus calles correspondientes, tema para otra entrega.
Por ahora, bajo embrujo sonoro y del ritmo de la hermosa melodía titulada: “Flor de Canela”, evocamos al Uruapan del ayer, con la inspiración del tío de los reconocidos artistas uruapenses Jorge y Javier Marín, don Carlos Marín López, en su artículo: “Las Desaparecidas Calles de Uruapan“, publicado en 1963.
“Calles tranquilas de mi pueblo; calles limpias, olorosas a tierra mojada; calles policromadas por su sol esplendoroso, ya arropadas por el bello azul de su cielo o plateadas por el baño de la luna; calles de embrujo, de ensoñación, tan llenas del romance de las serenatas y de los suspiros de los enamorados; calles que supieron de los anhelos de mi infancia y de las inquietudes de mi juventud; calles recatadas, señeras, empedradas, de aquella, nuestra gran casa solariega… ya tan lejanas por haber desaparecido y tan presentes en nuestro corazón en aras de nuestra añoranza, quiero ser el vocero de sus enamorados como yo, y al entonar el tremendo requiéscat de nuestra despedida, decirles que estarán siempre presentes en el ánfora excelsa de nuestros recuerdos, las calles de Uruapan”.
Sergio Ramos Chávez, Cronista de la Ciudad de Uruapan.
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