Para garantizar la equidad e inclusión sea el principio central del proceso educativo, la diputada Araceli Saucedo Reyes propuso reformar cinco artículos de la Ley de Educación del Estado, en la que se establecen esos principios, así como eliminar las cuotas voluntarias en las escuelas públicas ubicadas en zonas marginadas de Michoacán.

La también coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en la LXXIV Legislatura Local, sostuvo “la educación debe tener como objetivo principal la equidad, para que todos los alumnos y alumnas, sean quienes sean, puedan tener una educación equivalente que les proporcione los mismos derechos y oportunidades ante la vida. Esto es también garantizar la justicia social y considerar a la educación como un bien público”.

En la iniciativa que presentó ante el Pleno del Congreso del Estado, refirió que se establece la equidad en las condiciones y oportunidades para todas y todos los estudiantes en la entidad.

La diputada local por el Distrito de Pátzcuaro añadió que son necesarias dichas reformas, para garantizar que todos los sectores de la población no padezcan rezagos, impulsando con ello, a las mujeres, los pueblos y comunidades indígenas, así como a las y los jóvenes.

La equidad en la educación es uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo, sostuvo Araceli Saucedo, al señalar que la inequidad potencia la segregación social y disminuye las posibilidades de alcanzar la universalidad del derecho a la educación.

En ese contexto, dijo que en las reformas se prohíbe a todo el personal de las escuelas públicas, donde se imparta la educación preescolar, primaria, secundaria y media superior, imponer a los padres, madres de familia o tutores de los educandos, el pago de cuotas voluntarias de ningún tipo en las zonas de alta y muy alta marginación.

El Estado Mexicano es responsable, constitucionalmente, de dotar de educación básica a toda su población, no obstante, con cifras de 2016 el rezago educativo alcanzó 17.4%, una realidad que afecta de  forma directa a la productividad del país y margina a este sector de la población, condenándolos a un estado de pobreza y exclusión.

“Para el caso particular de Michoacán el rezago educativo alcanza cifras preocupantes, pues el 27.4% de la población no cuenta con la educación obligatoria vigente al momento  en que debía haberla cursado”.

Finalmente la líder de la bancada perredista dijo que, “es hora de que la dignidad de nuestras niñas y niños se refleje en la equidad de la educación pública michoacana y tenemos que garantizar que en ningún rincón, en ninguna comunidad, en ningún municipio michoacano, la educación a la que tienen derecho nuestros niños, niñas y jóvenes, dependa del lugar donde les tocó nacer o vivir”.